La Semana Santa es una gran oportunidad para meditar, reflexionar, encontrarme con el Señor.
Acompañemos a Jesús en el camino de Semana Santa con fe, esperanza y amor profundo. Unámonos a Jesús en oración, participando en las celebraciones con la comunidad, momentos que nos invitan a vivir, como laico mercedario, nuestra vocación de fe y servicio.