Además, estuvieron presentes la directiva nacional y el asesor, Fray Anselmo Espinoza Ibacache. El ambiente fue de camaradería y fraternidad, lo que permitió que todos trabajaran con mucho entusiasmo. Durante la jornada, se establecieron los objetivos de las actividades que se llevarán a cabo a lo largo del año, lo que promete ser un periodo lleno de iniciativas y colaboración; Sin duda, ¡un gran comienzo para el 2025!
Este año jubilar, convocado por el Papa Francisco, se centrará en la profundidad del encuentro con Jesucristo, buscando reavivar la fe, la esperanza y la caridad en todos nosotros. Es un tiempo de alegría y regocijo, recordando que "la esperanza no defrauda", que es el mensaje central de este Jubileo, celebrado cada 25 años. Sin duda, es un año de gracia y alegría para todos.
Además, en este encuentro se celebró la Eucaristía y se dedicó tiempo a la oración, elementos fundamentales en nuestra vida espiritual. Estos momentos de conexión y reflexión son esenciales para fortalecer nuestra comunidad y nuestra relación con Dios. ¡Qué hermoso es poder vivir esta experiencia juntos!
Por último, agradecer la buena acogida, el cariño y la atención para que este encuentro se realizará de la mejor forma.