Una sugerencia... que tal si todos el sábado 4 de abril, por la tarde, pusiéramos una rama en la puerta de la casa o en la ventana, para celebrar con fervor el Domingo de Ramos. Podría ser cualquier rama verde que consigamos.
Esto serviría para, a pesar del aislamiento social, estamos conectados en las ceremonias de la Semana Santa.
¿Quién se une?
¡Estamos aislados pero nunca separados... unidos con la Iglesia de Cristo!