lunes, 21 de septiembre de 2020

24 DE SEPTIEMBRE - FIESTA DE NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED

MARÍA DE LA MERCED, MISERICORDIA REDENTORA

Una de las manifestaciones de la función materna de María encuentra en la fundación de la Orden de la Merced su plena confirmación. Hay hombres privados de libertad y sometidos a la penosa realidad de no poder disponer libremente de sus personas. Los cautivos están en manos de otros que los dominan y oprimen. Los cautivos no son dueños de sí mismos, están soportando una de las pobrezas más hondas como es la falta de libertad. Tal situación tiene como causa el ser creyentes en Cristo. Se pretende que renieguen de su fe a través del sometimiento y malos tratos.

María es invocada como “consuelo de afligidos”, como la que mira “a los que están en este valle de lágrimas”, como la “madre misericordiosa”. Pedro Nolasco pone en sus manos esta penosa realidad de los cautivos. Busca la forma de ofrecer libertad; solo no puede hacer mucho, casi nada. Es necesario volver la mirada al Cielo e implorar día y noche hasta que se haga la luz de un nuevo amanecer para esa humanidad sufriente. Quizá hubo desaliento y ganas de abandonar la empresa. Pero ya no podía. El amor había encendido el fuego de redención. María lo ha mantenido en esta vigilia de esperanza y desconsuelo. Ella está ahí con Nolasco pensando lo mismo: hay que ofrecer libertad a quienes no la tienen.

Y con María, el caballero Nolasco inicia la tarea de recatar y visitar cautivos. La “merced” equivale a misericordia, adquiere el rasgo de la compasión del Buen Samaritano del evangelio. Los hechos de los cautiverios están ahí y seguirán estando a lo largo de la historia humana como un fiel reflejo que todavía no hemos comprendido la esencia misma de la redención cristiana.

Es tal simbiosis entre María y “merced” que Nolasco no trepida en “bautizar” a la Reina del Cielo con un nuevo título. La llamará como su obra: María de la Merced, que es igual a decir María de la Libertad, María de la Misericordia. Desde los orígenes la obra nolasquina será identificada como “obra mercedaria”, porque María está profundamente involucrada. Y con este título nuevo, Nolasco y los mercedarios han ofrecido al pueblo de Dios una nueva gracia de María a favor de los hombres oprimidos.

 Fuente: Agenda Estudiante Mercedario 2000